Los antioxidantes son sustancias naturales que frenan el envejecimiento de nuestras células, pero, ¿sabes cómo actúan?

Nuestro cuerpo está sujeto a cambios provocados por distintos factores ambientales como son la exposición al sol o la contaminación; y a hábitos poco saludables como el consumo de alcohol y tabaco.

Estos factores contribuyen a que el organismo se oxide de forma más acelerada formando una mayor cantidad de radicales libres que provocan un avance del envejecimiento. Y esto no sólo afecta al aspecto y calidad de nuestra piel, también puede favorecer la aparición de distintas enfermedades como, por ejemplo, las enfermedades cardíacas.

Los antioxidantes pueden proteger nuestro organismo de los daños que provocan los radicales libres a las células al actuar contra su efecto.

La principal fuente de antioxidantes la obtendremos de una alimentación sana y equilibrada, rica en vegetales.